El sillón Élan se forma a partir de una base que gana impulso y crece a través de una silueta continua, perfilando un robusto asiento para luego componer los reposabrazos y el respaldo del sillón. Las proporciones y la construcción cuidadosamente diseñadas de este producto aseguran un aspecto que se destaca en los ambientes y una comodidad que atrae al cuerpo al descanso y queda impresa en la memoria